Ruben López
El Chasque 96
27/07/2023
“Cuando la tendencia interna de la producción capitalista a extenderse ilimitadamente choca contra las restricciones de la propiedad privada, el crédito aparece como medio para superar esos límites en forma típicamente capitalista.” Rosa Luxemburgo
Decíamos en El Chasque 95: El capitalismo “remedia unas crisis preparando otras más extensas e imponentes y mutilando los medios de que dispone para precaverlas.” (Manifiesto Comunista. Marx y Engels)
Una forma para “remediar las crisis” es el endeudamiento. .. “la Deuda, personal, empresarial y pública es utilizada para ampliar el mercado”.
¿Por qué y cómo?
Supongamos que a Ud. no le da el efectivo, el ingreso del mes, para adquirir todos los bienes y servicios que desea para su hogar.
Pensemos en el empresario, productor o comerciante, el tiempo entre que compra materias primas, mercaderías de reventa o paga sueldos y gastos, hasta el momento que vende y cobra.
El Estado tiene que hacer frente a multitud de gastos e inversiones, en un momento no tiene el efectivo suficiente para cubrir el presupuesto.
La familia puede conseguir crédito, obtiene una tarjeta, recurre a un banco u otra financiera.
La empresa, tiene crédito de sus proveedores, recurre al banco o emite obligaciones si es bastante grande.
Y el Estado, emite Deuda Pública, bonos, letras de distinto tipo.
La respuesta es, porque no me dan los ingresos regulares, y recurriendo al endeudamiento es como adquiero los bienes y servicios.
El crédito ha existido casi desde siempre, no es nuevo, lo nuevo son los volúmenes que ha adquirido, en crecimiento continuo.
Pero este fenómeno tiene su origen en la necesidad de ampliar el mercado, facilitar la demanda de la producción que crece a ritmo acelerado por sobre la capacidad de compra de los consumidores.
Veíamos como son las contradicciones del propio sistema que desencadenan las crisis. Determinadas relaciones de producción frenan el desarrollo de las fuerzas productivas. Son las relaciones de propiedad, donde un pequeño núcleo de dueños de los medios de producción, se ubica por encima de una multitud que no los posee y debe vender su fuerza de trabajo para sobrevivir.
Esto abre una enorme brecha entre los ingresos y la riqueza de los primeros, sobre los segundos. Como consecuencia, los efectos de la ciencia, la técnica y la cada vez mayor productividad del trabajo, permite la acumulación de capital en pocas manos, a las vez que multiplica la pobreza y la miseria. El papel de la ciencia, de la inteligencia humana, que debería aliviar y alegrar la vida, en cambio (al servicio del capital) es freno para una demanda que las modernas máquinas, robots, inteligencia artificial, etc., son capaces de ofrecer, al mismo tiempo que miles de millones de seres humano pasan necesidades.
“..datos del 2021 a nivel mundial, el 10% más rico acumula el 52% de la renta y concentra el 76% de la riqueza. Mientras, el 50% de la población más pobre dispone únicamente del 8,5% de la renta y solo el 2% de la riqueza.. el Diario.es
Lo peor es que la cosa va in crescendo. Desde el año 1980, el 1% más rico ha capturado el 50% del crecimiento de la renta global del mundo” el Diario.es
Esta realidad muestra la verdadera causa de las crisis del sistema, que se oculta pues si se hiciera conciencia de ella en el pueblo, el sistema de privilegios actual estallaría en mil pedazos.
Entonces ¿Cómo es utilizado el crédito?
Ya a principios del siglo XX, Rosa Luxemburgo explicaba el papel del crédito en el sistema, hoy vemos en las finanzas mundiales, las Bolsas, un verdadero casino, como nuevos instrumentos de deuda como “los derivados”, se convirtieron en una bomba que hizo estallar la economía mundial -crisis de 2007-2008 con origen en USA-, y no fue peor por el salvataje que hicieron los Estados a través de los Bancos Centrales, al entregar billones de dólares a banqueros y multinacionales, que hubieran quebrado sin este subsidio (subsidio de los ciudadanos al Capital). Mientras millones de ciudadanos perdían sus casas y pasaban a vivir en la calle.
Pero vayamos a Rosa, que hace más de 100 años nos lo explicaba:
“El crédito posee diversas aplicaciones en el capitalismo. Sus dos funciones más importantes son extender la producción y facilitar el intercambio. Cuando la tendencia interna de la producción capitalista a extenderse ilimitadamente choca contra las restricciones de la propiedad privada, el crédito aparece como medio para superar esos límites en forma típicamente capitalista.
…... En tanto que crédito comercial acelera el intercambio de mercancías y con ello la reinversión del capital en la producción y así ayuda a todo el ciclo del proceso de producción…
… Si es cierto que las crisis surgen como resultado de la contradicción …(entre) la tendencia al incremento de la producción y la capacidad de consumo restringida del mercado, el crédito es precisamente…(lo que) hace que dicha contradicción estalle con la mayor frecuencia. En primer lugar, aumenta desproporcionadamente la capacidad de extensión de la producción y constituye así una fuerza motriz interna que lleva a la producción a exceder constantemente los límites del mercado.
Pero el crédito golpea desde dos flancos. Después de provocar (como factor del proceso de producción) la sobreproducción, durante la crisis destruye (en tanto que factor de intercambio) las fuerzas productivas que él mismo engendró. Al primer síntoma de la crisis el crédito desaparece. Abandona el intercambio allí donde éste sería aún indispensable y, apareciendo ineficaz e inútil allí donde sigue existiendo algún intercambio, reduce al mínimo la capacidad de consumo del mercado.” (Rosa Luxemburgo. Reforma o Revolución)
He aquí, en pocas palabras, el porqué y el cómo los Bancos Centrales (USA, Europa) financiaron y libraron de la quiebra a los grandes Bancos Privados. Y la razón por la cual les inyectan dinero fresco, a tasa cero, durante años. Además, reciben un regalo inesperado, que no sólo les permite eludir la quiebra, sino incrementar sus ganancias.
Las disposiciones (de los Bancos Centrales) no permiten dar crédito a los Estados, que es provisto por los Bancos Privados a un interés muy superior, dependiendo de la calificación del país.
Aunque nos parezca mentira o una broma de mal gusto, los Bancos Centrales dan dinero al Banco Privado a tasa 0 y éste le presta a los Estados al 1%, 2% o más.
Como verdaderos vampiros, una transfusión de sangre directa, desde los trabajadores -que lo pagan con su calidad de vida- al sistema financiero.
Sigue Rosa:
“Además de estos dos resultados principales, el crédito también influye en la formación de las crisis de otras maneras. Constituye un medio técnico que le permite al empresario tener acceso al capital de los demás. Estimula, a la vez, la utilización audaz e inescrupulosa de la propiedad ajena. Es decir, que conduce a la especulación. El crédito no sólo agrava la crisis en su calidad de medio de cambio encubierto, también ayuda a provocar y extender la crisis transformando el intercambio en un mecanismo sumamente complejo y artificial que, puesto que su base real la constituye un mínimo de dinero efectivo, se descompone al menor estímulo.”(Rosa Luxemburgo. Reforma o Revolución)
“Utiliza la propiedad ajena”... “y conduce a la especulación”: También conduce a la corrupción, a la formación de asociaciones lícitas e ilícitas que aumentan exponencialmente las ganancias de los que más tienen. La crisis de la burbuja inmobiliaria en USA, en 2007, y la posterior crisis financiera de 2008 (Lheman Brothers) y su secuela económico financiera en todo el mundo, que continúa hasta hoy, fue y es parte del esquema de los Grandes Capitales, que no encontrando en la economía real tasas de ganancia que les conformen, se lanzan hacia la especulación en torno al capital ficticio, financiarizado. Es la lógica interna del sistema, a la cual no puede escapar, donde se suceden crisis que pagan siempre los trabajadores y aquellos sectores de propietarios más débiles que terminan sen la quiebra.
¿Cómo se resuelve esta nueva Crisis?
En la década de 1970 se incentivó el crédito, aumentaba el endeudamiento privado para sostener las ventas. Cuando la burbuja inmobiliaria estalló (2007) porque los ciudadanos no pudieron endeudase más, perdieron su casa, su empleo o vieron rebajados sus salarios. Mientras, los responsables del desastre, cuando se derrumbaban sus enormes conglomerados y debieron quebrar –precio que merecían pagar por su ambición desmedida-, los gobiernos (representantes de esos capitales) corrieron en su ayuda. (El Estado en estos casos no fue prescindente)
Con el dinero y el endeudamiento público, terminan pagando todos los ciudadanos, socializaron las perdidas. Ahora si, el Estado intervino con la excusa perfecta, “para que los pueblos no sufran”, los privilegiados debían seguir amasando fortunas, privatizaban las ganancias. Eran “demasiado grandes para caer”, pues ante el peligro de hundir el sistema, todos corrieron a salvarlo. Así fue en el mundo “desarrollado y rico”.
Se supera la crisis de la demanda, que primero consumió los salarios, después la capacidad de endeudamiento individual, la empresarial y por último la deuda pública. Hay un común denominador: las cuentas la pagan siempre los mismos –trabajadores y sectores populares, pequeños propietarios- y los beneficios también a los mismos, a la oligarquía mundial y nacional.
Esta última, nueva y más profunda crisis – que trajo una mayor concentración de la riqueza (factor común de todas), prepara los fundamentos de la próxima.
Este mundo, donde manda el mercado, la mercancía para realizarse, necesita venderse, se necesita quien compre, y compra quien tiene dinero. Los dueños de la riqueza, en su afán de lucro, han hundido a la mayoría de la humanidad en la pobreza y la miseria, sin capacidad de compra, aunque le sobren necesidades.
Por el contrario, los que tienen, ya no encuentran más lujos para satisfacer, de ahí lo absurdo y patológico de una clase dominante que se ahoga en riquezas inconmensurables, se harta en el derroche y el consumismo.
Mientras, los que no tienen, no encuentran la forma de satisfacer sus mínimas necesidades.
2007 - 2023 Profundización de la crisis
Así, el incremento del crédito, el endeudamiento de la familias para sustituir el estancamiento en los salarios, un proceso que sigue con el neoliberalismo de Reagan y Tatcher, el consenso de Washington, la caída de la URSS, el mundo unipolar y el entronamiento del Gran Capital, la desregulación, la especulación, el capital financiero, para recuperar la caída de la tasa de ganancia, para continuar la acumulación, la concentración de riqueza como nunca antes.
Presentan al capitalismo como que no tiene límites, capaz de crecer hasta el infinito, sólo necesita que lo dejen hacer, una mayor libertad producirá el mayor beneficio para la humanidad, el mercado es el mejor asignador de recursos.
Pero, vemos como cada crisis profundiza las contradicciones, tras la catástrofe financiera de 2007-2008, cuando el mundo aún no se había recuperado, estalla la pandemia del Coronavirus y después la guerra Rusia-Ucrania con todas las consecuencias que vemos hoy, un mundo mulipolar, la debilidad de USA y del dólar.
¿Cual será la próxima etapa?
¿Una solución al endeudamiento y el déficit público de las principales economías?
¿El enriquecimiento permanente, la consolidación de una plutocracia mundial?
¿Profundización de la crisis del sistema?
¿El surgimiento de un mundo mulipolar?
¿El fin del sistema de explotación vigente?
El milagro de la ciencia, la técnica, la mayor productividad, la producción social,
-¿seguirán como fuente de acumulación de riqueza para unos pocos, una plutocracia inmensamente rica para imponer su dictadura sobre el conjunto de la humanidad?
-¿ o pasarán a estar al servicio, al fin, de los productores directos, los trabajadores y el pueblo?
Decíamos en El Chasque 95: “para la clase capitalista. .... La única cosa que les preocupa de nosotros es que nos alcemos en rebelión” (David Harvey)
Siguiendo ese hilo, lo que se necesita es, transformar esa rebeldía en organización.